Gran controversia se ha desatado en Alemania por la futura apertura en Berlín del restaurante "Flimé", establecimiento que a partir del próximo 8 de septiembre ofrecerá platillos exclusivos para caníbales, quienes podrán degustar sin ningún tapujo de los manjares más "exquisitos":
"Siguiendo el viejo proverbio wari, lo importante para nosotros es que 'comer es más que saciar el hambre'. Contemplamos la alimentación como un acto espiritual en el que se asume el alma y la fuerza del ser que ingerimos", declaró el brasileño Eduardo Amado, propietario del polémico establecimiento, el cual incluso ya ha alcanzado los oídos de algunos legisladores germanos, quienes repudian el hecho de que se abra un restaurante de esas características:
"Espero que sólo se trate de una broma de mal gusto", declaró Michael Braun, vicepresidente de la Unión Cristianodemócrata (CDU).
A la par de ofrecer los extraños platillos, el establecimiento también tendrá el servicio de recepción de órganos, el cual consistirá en recibir donaciones por parte de los comensales:
"Tras una revisión médica puede usted decidir qué parte de su cuerpo está dispuesto a donar", se menciona en la campaña promocional de este restaurante.
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